Tres de 706 tumbas del Panteón Mezquitán se han ocupado por fallecidos de COVID-19

Hasta el momento solo tres de 706 tumbas del Panteón Mezquitán se han ocupado por fallecidos de COVID-19. Aún no hay fecha para que los cementerios en Guadalajara regresen a la nueva normalidad.

Fue el pasado mes de abril que se instaló la Comisión Interinstitucional de Manejo de Cadáveres por COVID-19, la cual coordina las acciones entre las diversas dependencias y entidades del poder ejecutivo en los 125 municipios de Jalisco, prestadores públicos y privados de servicios hospitalarios, funerarios, de inhumación, cremación y demás análogos para el manejo, traslado y destino final de cadáveres cuya causa del deceso sea confirmada o sospechosa y esté relacionada con la pandemia, y por tal motivo se determinó destinar espacios exclusivos para la sepultura.

En Guadalajara, la administración municipal arrancó con el proyecto de renovación y construcción del Panteón Jardín Mezquitán al cual se invirtieron 6.5 millones de pesos para la rehabilitación de 706 espacios de inhumación individual, y también se asignaron 861 mil pesos a los trabajos de modernización de cuatro hornos crematorios.

La utilización de estos espacios es opcional, en caso de que los deudos cuenten con alguna propiedad en otro panteón, podrán decidir en dónde realizar la sepultura.

A más de 100 días del confinamiento por la pandemia y del cierre de espacios públicos clasificados como no necesarios y donde se generan aglomeraciones de personas, aún no se ha dado fecha para la apertura de los cementerios, sin embargo, con restricciones, continúan los servicios de cremación y sepultura.

Isela Ibarra