El Dilema de la Vacuna | Ignacio Román #VideoColumna

Pues bien, ya estamos en pleno periodo de supuesta vacunación. Sin embargo, tenemos un problema enorme: resulta que no es realmente la OMS quien está pudiendo tomar las riendas de la vacunación a nivel mundial.

Menos los gobiernos nacionales, cuya disposición de vacunas depende, evidentemente, de lo que estén haciendo las grandes farmacéuticas. Y a su vez, las grandes farmacéuticas, están en gran parte dependiendo de sus juegos de poder económico y político con los gobiernos.

¿Qué es lo que esto ha implicado? Que primero, empresas como AstraZeneca hayan establecido un contrato gigantesco con la Unión Europea, luego hayan dicho que iban a reducir su aprovisionamiento de entre el 65 y el 75 por ciento.

Luego que Pfizer retrasara las entregas, lo que nos tocó a México muy fuertemente, desde el 19 de enero hasta el próximo 15 de febrero, y finalmente parece que hay una rebatinga de mercado, a ver quién se lleva las vacunas.

Por otro lado, a la hora de hablar de eficiencia de las vacunas, viene también la gran bronca, ¿quién decide fehacientemente cuál sirve para quién, cómo y cuánto? y en lo que corresponde a México, desgraciadamente, parte de los contratos fundamentales, están con las empresas que han tenido problemas de aprovisionamiento: Astra y Pfizer.

Y por el otro lado entonces, lo que se hizo fue recurrir muy rápidamente a la contratación de vacunas de Sputnik.

En todo caso, tenemos otras 40 y tantas vacunas en experimentación a nivel mundial que han llegado al punto que algunos países, como Cuba, se esté planteando el vacunar a toda su población, prácticamente, a partir de de una vacuna propia, la Soberana 2.

Ahora la cuestión es finalmente, qué podemos hacer en México para que una situación de tal vulnerabilidad, frente a las farmacéuticas y frente a organismos privados, no continúe permanentemente y volvamos a tener un país que pueda atender, de manera más independiente, sus propios procesos de salud.