Ford y Chevrolet serán vetadas en Tlajomulco

El alcalde de Tlajomulco, Alberto Uribe, señaló que debido a que las marcas automotrices norteamericanas, Ford y Chevrolet, han tratado a México como un país “de segunda”, estas marcas estarán vetadas en lo que adquisiciones se refiere en su administración.

Mediante un mensaje en sus redes sociales, tanto en español como en inglés, Uribe Camacho señaló que la última compra de vehículos que hizo el municipio incluyó más de cien unidades de este par de marcas, algo que no se volverá a repetir.

“La pasada compra de vehículos en Tlajomulco fueron 99 Chevrolet y 2 Ford. En la siguiente compra, no contemplaremos de nuevo a estas marcas. No vamos a comprar a empresas que están de acuerdo en tratar a México como un país de segunda. #México está unido y tiene dignidad”, apuntó el alcalde.

Esta decisión se suma a las tomadas tanto por empresas privadas como por otros gobiernos, que han decidido cancelar contratos de concesión con estas firmas automotrices, luego de que decidieran retirar parte de su inversión de nuestro país, para llevarla a Estados Unidos, por presiones públicas impulsadas por el presidente electo Donald Trump.

Por ejemplo el gobierno del estado de Campeche, anunció una medida similar apenas hace un par de días. El mandatario estatal Alejandro Moreno Cárdenas, señaló que su administración no volverá a adquirir vehículos Ford, ya que dijo es “hora de demostrar de qué estamos hechos los mexicanos”.

La constructora Coconal, avisó a la conscesionaria Ford que tampoco adquiriría sus vehículos de manera indefinida, el anuncio se hizo el pasado 12 de enero. Por su parte la empresa de entretenimiento más importante de Quintana Roo, Experiencias Xcaret, anunciaron una medida similar, en contra de la marca norteamericana.

En las últimas fechas, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha tratado de convencer a marcas automotrices de llevar sus inversiones de regreso al país, amenazando a aquellos que produzcan autos en México que se vendan en la Unión Americana, de subir los costos arancelarios.