Municipios con menos casos COVID-19 serían los primeros en volver a clases
Los municipios con menos casos de COVID-19 podrían ser los primeros en volver a clases presenciales de forma gradual y posiblemente en enero de 2021, así lo señaló el secretario de Educación en Jalisco (SEJ), Juan Carlos Flores Miramontes. Los maestros que han reportado asuntos relacionados con la salud serán verificados mediante el sistema IMSS e ISSSTE.
Cuatro son los comités que están citados la próxima semana y sus integrantes abundarán sobre la epidemia, los contagios y experiencia para el regreso a clases.
El secretario apuntó que en medida de que reduzcan los contagios, será más rápido el regreso a las aulas y que la apuesta será que todos los niveles educativos de formación básica entren en este esquema.
“Pasar de la fase uno en educación a la fase dos implica la asistencia del 50 por ciento del grupo, implica una jornada en donde se reducen los recesos, son las mismas cargas horarias, pero prácticamente se evita el receso para consumir alimentos, lo que se está buscando es que sí haya momentos de descanso, que se tenga buena circulación del espacio para que no se concentren alumnos en la misma atmósfera, digamos”.
Flores Miramontes precisó que en el caso de las poblaciones pequeñas, en donde las escuelas son multigrado o bien en las secundarias de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) que tienen más de mil alumnos, habrá que hacer adecuaciones.
“La propuesta de la Mesa de Educación será que la asistencia permanezca al 50 por ciento, una semana y una semana, de lunes a jueves y el viernes le libre al maestro y pueda hacer esa planeación especial, hay que tener en consideración que la Mesa de Educación ha dispuesto que al maestro no se le cargue doble trabajo en la jornada presencial con la de distancia”.
Además se contempla que la semana que los estudiantes no asistan a clases, deberán realizar actividades complementarias a distancia.
Sobre la situación de salud de las y los maestros, el funcionario precisó que se tiene una encuesta en donde han encontrado que más de cuatro mil docentes rebasan los 60 años y que el 20 por ciento de más de 80 mil podrían tener alguna complicación para regresar a la presencialidad debido a que son población vulnerable.
Isela Ibarra
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