La travesía de Armando

Armando Yael usa silla de ruedas y hoy se propuso documentar su travesía de este sábado: ir a visitar a novia. Empezó a transmitir a las 10:33 de la mañana para registrar lo complicado que es para una persona con discapacidad trasladarse en esta ciudad si no se tiene un medio de transporte particular.

Armando decidió hacer transmisiones en vivo en su cuenta personal de Facebook, para que las personas sean testigos de lo que a diario tienen que padecer, una promesa de accesibilidad universal en Guadalajara que no se cumple.

Tenía un plan previsto para cumplir con su travesía de hoy. Tomar un mototaxi que lo sacara del fraccionamiento donde vive en el sur de la ciudad, después tomar un camión de la ruta 619, bajarse en López Mateos y de ahí abordar un camión más de la ruta 632, para finalmente llegar a los Arcos de Zapopan.

La primera parte de su plan se viene abajo. Parece que hoy no hubo suerte, y aunque sí pasó un mototaxi cerca del coto donde vive en la zona del Palomar, no pudo pescarlo. Tuvo entonces que cortar su primera transmisión para poder subir una pendiente, salir a una calle más transitada donde sea más sencillo tomar un mototaxi que lo lleve a la parada del camión.

Armando detalló los peligros que le significaría tratar de aventurarse a bajar por sí mismo hasta donde está el parabús. Una calle en bajada que no cuenta con banquetas lo dejan a merced de un mototaxi, o un buen samaritano que se ofrezca a llevarlo de aventón. La suerte le sonrió un poco al protagonista de esta travesía, alguien con excelente voluntad se ofrece a llevarlo, corta la segunda transmisión.

En el tercer video en vivo, Armando cuenta que este “milagro” se lo adjudica a un chofer de Uber que le dio “ride” a una parada del camión que está en López Mateos en Zapopan. Esto hizo que el joven en silla de ruedas pudiera ahorrarse dos pasos del plan original: tomar el mototaxi y también el camión 619.

Parece que la fortuna está de su lado.

El optimismo sin embargo no sería muy duradero. Pese a que pudo observar que había varias unidades de la ruta 632 (su siguiente paso en la lista), ninguno contaba con rampa para discapacitados.

Con un dejo de decepción, narra la incoherencia que es para él que las unidades nuevas de “ruta modelo” de la 632 no tengan estas rampas, pese a ser unidades bastante cómodas y bonitas.

Eran las 11:03 de la mañana, y Armando tuvo que dejar pasar tres unidades, debido a la falta de rampa. Los minutos pasaban y el ánimo decaía. Una hora se fue y con ella, entre 8 y 9 camiones, ninguno contaba rampa.

Toda la ventaja de tiempo que ganó con el aventón, dado por el chofer de Uber, se esfumó debido a la tardanza del 632.

La desesperación se hacía cada vez más evidente en la narración de Armando en sus videos en vivo, el ánimo con el que inició va decayendo. Once camiones han pasado, la posibilidad de quedarse varado en la parada del camión se empieza a asomar.

Hora y veinte minutos después de esperar, por fin llegó una unidad con rampa, y pasa algo totalmente irónico, la unidad no venía sola. Dos camiones con rampa vienen juntas, algo que a las personas con discapacidad no les sirve de absolutamente nada.

Ya en un tono molesto y antes de abordar por fin la 632, recordó que un día esperó hasta tres horas por un camión adecuado para personas que se mueven en silla de ruedas.

La peripecia no terminó ahí. Ya en dentro de la unidad, y con un viaje de una hora delante de él, Armando pudo detallar algunos de los fallos de seguridad que tenía el vehículo que le tocó abordar.

La más grave sin duda es la falta de un cinturón de seguridad. La carencia de este elemento contraviene lo que incluso está estipulado en letreros dentro de la unidad, que dice claramente que la silla debe ser fijada y que él debe portar un cinturón de seguridad.

Tres horas más tarde Armando concluyó sus transmisiones respondiendo algunas preguntas, como por ejemplo ¿por qué sus papás no lo habían llevado a casa de su novia? La respuesta es clara, no pueden hacerlo debido a que trabajan. El hecho es que cualquier ciudadano, en cualquier condición, pueda moverse de forma independiente, de eso se trata la accesibilidad universal.

Es la 1:30 de la tarde, por fin llegó a su destino, no sin recibir la ayuda de su suegro que le dará un aventón a su casa, por desgracia querer hacer ese recorrido sin ayuda no es posible, la infraestructura no lo permite hacerlo de forma segura.

Hace no mucho el gobierno del estado inauguró en la Costa Alegre la primera playa incluyente en un poblado de Cihuatlán, esos esfuerzos son aplaudibles, sin embargo cuando vemos casos como el de Armando Yael, nos hace preguntarnos si primero no tendríamos que garantizar la movilidad segura y de manera fácil para todas las personas con discapacidad en la capital del estado.

¿Cuántos casos como el de Armando habrá todos los días?