Triunfal cerrojazo en la Plaza de Toros Nuevo Progreso

Llegó a su fin la temporada de reapertura de la Plaza de Toros Nuevo Progreso de Guadalajara. En una corrida de rejones, el capitalino Emiliano Gamero logró un gran triunfo, así se cerró el telón del coso de la colonia Monumental. 

Para esta, la onceava corrida del serial, se lidiaron toros de la ganadería San Marcos. Cumplieron a cabalidad en presentación y juego, permitiendo faenas destacadas. Los tres centauros fueron coreados con fuerza por el público.

Emiliano Gamero logró un triunfo importante en esta plaza. De manera contrastante, cortó dos orejas con el último de su lote. El de Ciudad de México debía sacarse la espina con el primero de su cuenta. Fue un toro que colaboró, pero Gamero no logró acomodarse. Se perdió con el rejón de muerte, escuchó un aviso y tuvo que recurrir al descabello.

El contraste vino con el cierra plaza, un toro que generó gran polémica. La afición pedía insistentemente al juez que le perdonara la vida. El de San Marcos mostró múltiples cualidades. Destacó por su bravura, acometida y fijeza, además de la fuerza suficiente para mantener el hocico cerrado de principio a fin.

El centauro capitalino aprovechó las bondades del ejemplar para fincar una interesante faena, misma que abrió recibiendo al toro a porta gayola. Cuajando pares de banderillas y lidiando de pecho a enanca, Gamero supo echarse el público la bolsa conjugando su torería con las maniobras ecuestres que caracterizan a su cuadra. 

Fue justo cuando tomó el rejón de muerte que el público comenzó a pedir al juez el indulto, sin embargo, aún con la polémica, la máxima autoridad decidió que el toro debía morir. Inconforme, Emiliano se fue tras el acero sepultando el rejón trasero, acción que fue suficiente para que el público exigiera le entregaran las dos orejas 

Quienes también tocaron pelo fueron el español Andy Cartagena y el potosino Jorge Hernández Gárate. El ibérico destacó con el que abrió plaza, un toro que colaboró y que fue bravo, al que Andy despachó de pinchazo y entera en sitio que le valió la primera oreja de la tarde.

Edgar Flores