Aleks Syntek critica los algoritmos digitales

Aleks Syntek visitó Guadalajara para promocionar la versión renovada de su canción de 2003, “A veces fui”. ¡Sí Jalo! fue uno de los últimos medios en conversar con el artista. Aunque su sonrisa y amabilidad permanecían intactas, el cansancio era evidente en su rostro, probablemente por la extensa jornada de entrevistas o por hablar tanto sobre cómo pensó en la voz de Mijares al grabar el tema para “Mundo Lite”. Así que nuestra primera pregunta era inevitable.

¡Sí Jalo! (SJ). Alex, ¿Cuál es la pregunta que no te hicieron hoy y sobre la que te gustaría hablar?

Alexs Syntek (AS). Me encantaría que me preguntaran en qué se diferencia un concierto de Aleks Syntek de otros conciertos. Puede gustarte o no de mi música, pero si no has vivido una experiencia en vivo conmigo, no puedes juzgar mi trabajo. Soy un artista formado en los escenarios desde niño, con 35 años de trayectoria discográfica, ofreciendo conciertos y giras. Siempre me he esforzado para que mis presentaciones sean experiencias memorables, que dejen un gran sabor de boca e inspiren a las personas.
Actualmente, tengo una súper banda compuesta por mujeres músicas. La baterista es de Guadalajara, Jalisco; la bajista, yucateca; y la guitarrista, zacatecana. Me encanta tener esta banda porque aportan una energía única a mi espectáculo. Tocan de forma increíble y son un gran ejemplo. Para mí, es mucho más fascinante ver a una mujer tocando un instrumento que verla bailando. Es como cuando ves a Alondra de la Parra dirigiendo una orquesta, es algo inspirador.
Creo que es tiempo de que los hombres también valoren esto. Me considero pro feminista; detesto la misoginia, y por eso mis canciones siempre han alabado a la mujer. Es algo característico de mi música: mostrar el lado artístico y celestial de las mujeres.

SJ. Siempre me ha llamado la atención la energía de tus conciertos…

AS. Mucha gente piensa que soy muy catedrático y que estoy detrás del piano tocando, pero no. Me gusta ser divertido, me bajo al público, me tomo selfis con ellos, me subo al escenario, subo gente al escenario a tocar conmigo; les doy serenata a las chicas y hago cosas muy teatrales en canciones, nos ponemos antifaces de máscaras locochonas del teatro antiguo, de cabaret francés… toco mis canciones de cumbias, hago buena pachanga; son muchas las canciones que la gente ha escuchado mías, lo que pasa es que no se acuerdan. Pero desde la década de los 90 hasta acá he tenido más de 30 canciones en los primeros lugares de radio y son muchos éxitos, entonces me aprovecho de eso y los hago una experiencia inmersiva en mi música.

Aleks Syntek expresó su preocupación por cómo los algoritmos de las plataformas digitales han transformado la manera en que se consume música. «La industria está amarrada por estos algoritmos, que no están diseñados para detectar la calidad musical, sino para medir la viralidad», afirmó. Según él, esto ha llevado a que la música que se vuelve popular a menudo carezca de profundidad emocional y espiritual, priorizando en su lugar un contenido más superficial y, en ocasiones, vulgar, que atrae rápidamente a un público joven.
Aleks Syntek también reflexionó sobre el futuro de los músicos que se dedican a crear obras de calidad. «Los artistas que no son considerados ‘trendy’ pueden verse forzados a abandonar la música», advirtió. A diferencia de mercados como el estadounidense y europeo, donde géneros como el pop y el rock continúan vendiendo entradas para conciertos, en Latinoamérica parece haber una tendencia a encasillar la música en géneros más pegajosos y menos diversos.
Además, Sintek criticó el uso de la inteligencia artificial en la creación musical, señalando que esta práctica podría llevar a una «destrucción cultural». «Si no usamos esta herramienta con responsabilidad, podríamos enfrentar un futuro donde la música predomine como creación generada por computadora», lamentó. Además, enfatizó la importancia de respetar los derechos de los artistas originales.
A medida que la industria musical evoluciona, Aleks Syntek se mantiene firme en su creencia de que la calidad y la autenticidad deben prevalecer sobre la mera viralidad. Su llamado a la reflexión invita a artistas, productores y oyentes a considerar el verdadero valor de la música en un mundo cada vez más dominado por la tecnología.

Pablo Garabito