Cuando la familia es el reto: ‘Aprender a soltar’

El drama sueco “Aprender a soltar”, dirigido y protagonizado por Josephine Bornebusch, es la película más vista en Netflix este fin de semana. La historia sigue a Stella (Bornebusch) y Gustav (Pål Sverre Hagen), un matrimonio en crisis que se ha vuelto distante y sin mucho en común. Cuando Gustav anuncia que quiere divorciarse, Stella, aunque devastada, decide no facilitarle las cosas. 

A pesar de la tensión entre ellos, ambos acuerdan acompañar a su hija adolescente, Anna (Sigrid Johnson), a un concurso de pole dance. Junto a su hijo Manne (Olle Tikkakoski Lundström), emprenden un viaje que pronto se convierte en un campo de batalla de emociones.

Al inicio, Gustav se presenta como un hombre distante y egoísta en su búsqueda de una “nueva vida”. Su falta de compromiso como padre agrava la carga de Stella, quien parece llevar la responsabilidad familiar en silencio. El guion, sin juzgar abiertamente, invita a cuestionar la capacidad de Gustav para distanciarse de su familia. La interpretación de Bornebusch transmite eficazmente las tensiones acumuladas en el matrimonio y las frustraciones de una esposa que se siente abandonada. Por otro lado, las exigencias de Gustav de participar en la crianza se sienten superficiales y generan en el espectador una empatía hacia Stella.

Las actuaciones del reparto son destacadas. Bornebusch, quien además de dirigir y actuar, también escribió el guion. Equilibró su papel de forma que no opacara a los demás. Su personaje muestra una mezcla de cansancio y determinación que la lleva a sostener a su familia en estas vacaciones improvisadas. Hagen, como Gustav, retrata con eficacia la arrogancia y apatía que frustran a Stella y a los espectadores. Sigrid Johnson, como Anna, se convierte en el personaje más entrañable a medida que su frustración inicial revela la profundidad de su infelicidad. Olle Tikkakoski Lundström es encantador como el joven Manne, y Tone Danielsen aporta autenticidad en su rol de Astrid, la madre de Gustav.

“Aprender a soltar” profundiza en las complejidades familiares. Explora cómo los roles tradicionales y el control pueden tensar las relaciones. A medida que se revela el carácter controlador de Stella, comprendemos que la dinámica familiar es compleja, y que tanto el amor como la incomprensión pueden hacer la convivencia difícil. El filme muestra los desafíos de la vida familiar y cómo, a pesar de los conflictos, el afecto y el compromiso los mantienen unidos.

Pablo Garabito