NoticiasDefraudados piden que Santander les reponga su dinero
Defraudados piden que la institución bancaria Santander les reponga el dinero que les fue despojado de sus cuentas luego de haber sido víctimas de diversos ciberdelitos, a su ver, a consecuencia de escasos protocolos de seguridad, a los perfiles inadecuados en algunos trabajadores, al tráfico de bases de datos, entre otros.
El Comité de Organización y Representación del Movimiento “Defraudados en Santander México” informó que durante septiembre y octubre de 2020, dos mil clientes de esta institución fueron víctimas y que a la fecha no les han resuelto.
Patricia Gutiérrez Otero, vocera nacional del Comité señaló que la Ciudad de México, el Estado de México, Guadalajara, Puebla y Veracruz, son los lugares donde han detectado mayor número de situaciones.
La vocera añadió que en coincidencia han encontrado que casi todos los atracos se realizan a través de la banca en línea y por suplantación de identidad, además de los robos de sim del celular de los cuales se extraen datos “que se supone sólo el banco debe conocer”, señaló que también han detectado casos donde están inmiscuidos los empleados bancarios y esto desencadena en asaltos conejeros.
“Nuestra finalidad es que el banco Santander asuma su responsabilidad por la baja seguridad general que demuestra tener en todos sus asuntos, tanto en la selección de sus empleados, como en ciberseguridad así como en la aplicación de protocolos y que por ello devuelva a la gente lo que le ha sido injustamente sustraído de sus cuentas”.
Como parte de su defensa, Gutiérrez Otero indicó que ya reúnen a un grupo de abogados para una demanda colectiva y mercantil, además de que buscan recabar información demás personas defraudadas y darle difusión a la situación.
El Comité recientemente lanzó una campaña denominada “Alza la voz” la cual es un llamado a exempleados bancarios para que de forma anónima puedan contribuir y denuncien malos manejos al interior del banco, a personas externas o bandas del crimen organizado que realizan estas prácticas.
El quebranto promedio alcanza los 125 mil pesos por cliente, aunque se tiene conocimiento de cuentas que «quedaron» en ceros y que tenían fondos superiores a los cinco millones de pesos.
Isela Ibarra
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