Revela sondeo alta vulnerabilidad en estudiantes de la UdeG

Un sondeo reveló alta vulnerabilidad en estudiantes de la Universidad de Guadalajara (UdeG). Ademas de presentar dificultades en la conectividad, debido a la situación sanitaria y que no consideran adecuada la educación a distancia, al menos el 22 por ciento de los participantes en la encuesta reconoció que ha pensado en desertar de sus estudios.

Francisco Javier Armenta Araiza, dirigente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), encabezó la presentación de dicho sondeo con el cual, desde la organización, buscan incidir en la toma de decisiones.

Por su parte Armando Cardenas Covarrubias, Coordinador de Análisis de Datos de la FEU indicó que del 23 de julio al 31 de agosto fue cuando realizaron el sondeo, participaron 30 mil 178 estudiantes (9.6 por ciento de la población) de los diversos sistemas de la UdeG.

Los resultados arrojaron que el 40 por ciento de estudiantes trabaja, y que el 13 por ciento de ellos perdieron su empleo a raíz del COVID-19; los ingresos se modificaron o disminuyeron en al menos un 55 por ciento de quienes trabajan; el 43 por ciento respondió que tiene compromisos económicos en la adquisición de productos, pago de renta, y la contribución con los gastos familiares.

Solo el 12 por ciento de la población de Centros Universitarios manifestó recibir algún apoyo o beca, mientras que para el Sistema Educación Media Superior el 82 por ciento dijo recibirla.

En un 70 por ciento los apoyos provienen del gobierno federal, seguido de la Universidad de Guadalajara, gobierno estatal, municipal, o alguna empresa o institución con la modalidad de becarios.

Sobre el regreso a clases, el acceso a la tecnología y aprovechamiento del semestre virtual en donde se midió el aprovechamiento y cómo se sienten las y los alumnos con sus clases se observó que “el 29% de los alumnos no encontró algún libro o tuvo dificultades sustantivas para encontrar material en bibliotecas virtuales o materiales digitales, esto es significativo ante la imposibilidad de ir a espacios físicos”, señaló.

Las plataformas más utilizada para la realización de tareas es classroom, y para recibir clases en línea classroom y zoom.

Sobre las estrategias de aprendizaje y su propio aprovechamiento Cárdenas Cobarruvias dijo les sorprendió obtener esos datos similares entre las opiniones negativas y positivas, destacó la indiferencia o el “me da igual” y que la percepción en general fue incómoda respecto a cómo ellos accedieron a las tecnologías.

“El 74 por ciento de los alumnos tiene una computadora en casa pero de estos, el 60 por ciento la comparte con su familia, el 40 por ciento tiene para uso personal y en el acceso a internet el 15 por ciento no tiene ningún acceso, es decir esta población todavía se encuentra en una situación de vulnerabilidad al no poder acceder a sus clases y tiene que hacer uso de espacios públicos que están restringidos o bien acceder a lugares como cibers para poder tomar tus clases”.

Respecto a la percepción de los alumnos sobre el regreso a clases para el nuevo ciclo escolar, el 59 por ciento consideró que se debía reanudar las clases a partir del 7 de septiembre con la pandemia, y sobre si en la escuela decidieran reabrir a clases de manera presencial, aún con la pandemia, el 80 por ciento manifestó que acudiría.

En el apartado de deserción escolar y apoyos a estudiantes, el 19 por ciento de los encuestados manifestó el deseo de pausar sus estudios y un tres por ciento el deseo contundente de dejar de estudiar.

Para las licencias o pausa a los estudios, el 82 por ciento dijo que le vendría bien un periodo de seis meses, esto debido a causas que tienen que ver con que no se aprende de la misma manera en línea, seguido de que el nivel académico de manera virtual no es el mismo, de que la familia enfrenta problemas económicos, que se ha perdido el empleo, y también por problemas de salud mental o física.

El 71 por ciento manifestó estar enterado de la dinámica para la entrega de despensas y de estos solo el 16 por ciento fue beneficiado. Del programa para el préstamo de computadoras y tablets para hacer tareas en casa, la mitad de las y los sondeados dijo saber del programa, pero solo el dos por ciento obtuvo una máquina.

Armenta Araiza enfatizó en que “las desigualdades que tiene el país está teniendo una consecuencia negativa y las diferencias del aprendizaje son significativas entre la comunidad”.

Desde la FEU se hicieron cinco propuestas: atender la educación virtual y la recuperación institucional mediante plataformas de la universidad virtual; consolidar un proyecto alternativo como la apertura de laboratorios de la universidad, puntos de acceso gratuitos.

El tercer punto es prevenir la deserción escolar al utilizar tutorías; el cuarto es atender la situación académica a los más vulnerables facilitando libros y manuales para quienes no tienen capacidad financiera de adquirirlos, además poner una línea de atención para reportar si algún docente les obliga a realizar la compra de manuales y también para que sirva como vía de contacto en la localización de docentes y se señale, si es el caso, a quienes no dan clase.

Por su parte la secretaria general de FEU, María Fernanda Velasco Abrica exhorto a todas las áreas de la Universidad para que se implemente el protocolo de actuación en contra del acoso, esto debido a la exposición y posible vulnerabilidad al trabajar vía digital.

Isela Ibarra

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