La empleada de la guardería Gabilondo Soler en Tlaquepaque, que la semana pasada entregó a un pequeño sin vida a la madre del menor, pasará al menos un año en prisión.
El hecho ocurrió el pasado jueves, cuando una mujer llegó a recoger a su hijo de siete meses al mencionado establecimiento, una empleada del lugar, presuntamente la directora del plantel, llevaba al pequeño en la parte trasera de su camioneta particular, el pequeño no presentaba signos vitales.
Las investigaciones apuntaron a que el niño falleció por una broncoaspiración, y la imputada, identificada como María de los Ángeles, en el momento de los hechos le indicó a la madre que el menor se encontraba en el asiento del copiloto de su vehículo, debido a que durante el tiempo que estuvo bajo su cuidado, requirió llevarlo de manera urgente a un puesto de socorro, porque se encontraba mal.
La mujer abrió la puerta para sacar al pequeño y trasladarlo al auto de la madre y así colocarlo en su asiento, entonces el bebé ya se encontraba sin vida. Debido a la situación, la empleada fue detenida y se le decretó, como medida cautelar, un año con tres meses de prisión.
Autoridades, al llevar a cabo investigaciones en la estancia infantil encontraron numerosas irregularidades, por ejemplo falta de permisos y varias carencias en lo que a medidas de protección civil se refiere.
MGC
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